viernes, 12 de diciembre de 2008

Carta a los Reyes Magos

Ésta es la carta que envía una madre a los Reyes Magos:

Queridos Reyes Magos:

Os escribo esta carta con un lápiz rojo de mi hijo, en el dorso de un recibo, sentada al lado de la lavadora , y quien sabe cuando volveré a tener un poco de tiempo libre en los próximos 18 años.

He sido una buena madre durante todo el año. He alimentado, lavado y cuidado a mis hijos cada vez que lo han necesitado. He visitado al pediatra muchas más veces de lo que he visitado a mi propio médico. He vendido sesenta y dos cajas de barritas de chocolate para lograr el dinero para plantar un árbol que dé sombra en el patio de la escuela. Pensaba que quizás, visto que no te he pedido nunca nada, esta Navidad podrías traerme algunas cositas. Aquí tienes mis deseos:
Me gustarían un par de piernas nuevas que no dolieran (cualquier color va bien menos el morado, de esas ya tengo) y unos brazos que resistieran y fueran lo suficientemente fuertes como para apartar a mi hijo del estante de las golosinas, mientras hace una rabieta en medio del supermercado.

También quisiera una cintura, ya que en algún lado perdí la que tenía, hacia el séptimo mes de mi último embarazo.

También me gustarían unas ventanas resistentes a las huellas, una emisora de radio que sólo ponga música para adultos, una televisión que no contenga solo programas de animales que hablan, y un rinconcito secreto detrás de la nevera donde poderme esconder para hablar por teléfono.

En el aspecto práctico, quisiera una muñeca que hable y diga, 'Sí, Mamá' para ayudarme en mi autoestima como madre, junto con dos niños que no peleen, y tres pares de vaqueros que se abrochen sin necesidad de tanta fuerza.

También me gustaría una grabación de monjes tibetanos cantando 'No comer en el salón" y 'Quítale las manos de encima a tu hermano' ya que mi voz parece estar fuera del alcance auditivo de mis hijos y puede ser escuchada solo por el perro.

Sería maravilloso si hicieras que mis hijos ayudaran en casa sin necesidad de pedir dinero a cambio.
Si fuera tarde para encontrar todo esto, quisiera al menos el tiempo suficiente para cepillarme los dientes y peinarme (todo en la misma mañana), o el lujo de sentarme y comer la comida caliente, no a temperatura ambiente, sin que tenga que comerla del mismo Tupperware.

Seria demasiado pedir que pudiéramos llamar 'verduras' a la salsa de tomate? Me ayudaría a tener la conciencia en paz.

Bueno, Reyes Magos, la alarma de la secadora me indica que ha terminado su ciclo y mi hijo se ha dado cuenta que estoy aquí encerrada. Creo que quiere que le devuelva su lápiz. Que tengas un buen viaje y recuerda sacarte tus húmedas botas antes de entrar.

Puedes comerte las galletas que te dejamos en la mesa, pero cuidado con echar migas a la alfombra.

Con cariño... MAMA!!

P.S. Ah!... otra cosa, puedéis anular todos mis deseos con tal de que hagas que mis hijos crezcan felices, sanos y se conviertan en personas de bien.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Creo que esta mamá se ha acordado de casi todo, pero le ha faltado un pequeño detalle que yo voy a recordarle a los Reyes Magos en mi carta. Además de mamás somos esposas y no vendría nada mal que los Reyes Magos nos trajeran un muñeco grande que nos dijera que estamos muy guapas y que lo hacemos todo muy bien. Y que cuando estamos por la noche dormidas en el sofá mientras ellos ven la televisión después de un día de trabajo fuera de casa, de hacer las compras, de recoger a los niños, dar baños, hacer la cena y recoger la cocina, hubiera un teletrasportador que me pusiera en la cama, me tapara con la manta y me dejara dormir sin despertarme hasta la mañana siguiente.
Feliz Navidad a todos
Carmen