viernes, 25 de enero de 2008

YA ESTAMOS PREPARANDO el Día de la Paz y el Carnaval


Emilia nos ha dicho que todo el Centro se encuentra en ebullición. En las aulas, en la sala de profesores, en los pasillos se estan preparando estas actividades. Al exterior sólo sale una parte del trabajo: los actos. Pero este tipo de actividades lleva un gran trabajo de preparación.
Con Antonia hemos hecho un mural de la paz que han colocado en la entrada. En nuestra clase hemos picado palomas de la paz para adornar.
Emilia nos ha contado el cuento de Fernándo Alonso" El hombrecillo de papel".Después del cuento, entre todos hemos ido diciendo las palabras que nos gustaría que llevara el muñeco de papel que hiciéramos nosotros. Todas las palabras las hemos escrito, coloreado y recortado y las hemos pegado en nuestro muñeco de papel.
Emilia lo ha colocado en la puerta de entrada para que cada vez que entremos se nos llene nuestro rostro de sonrisa como en el cuento.

El hombrecillo de papel

Era una mañana de primavera y una niña jugaba en su cuarto.
Jugó con una pelota y con un rompecabezas.
Pero pronto se aburría de todo. Luego empezó a jugar con un periódico.
Primero hizo un sombrero de papel y se lo puso en la cabeza.
Después hizo un barco y lo puso en la pecera.
La niña se cansó también de jugar con el sombrero y con el barco.
Entonces hizo un hombrecillo de papel de periódico.
Y estuvo toda la mañana jugando con él.
Por la tarde la niña bajó al parque para jugar con sus amigos.
Iba con ella el hombrecillo de papel.
Al hombrecillo de papel le gustaron mucho los juegos de los niños.
Y los niños estaban muy contentos con aquel amigo tan raro que ahora tenían.
Por fin todos se sentaron a descansar.
El hombrecillo de papel de periódico era muy feliz Y quería que los niños estuvieran contentos.
Por eso comenzó a contarles las historias que sabía.
Pero sus historias eran historias de guerras, de catástrofes, de miserias
Y los niños, al oír aquellas historias, se quedaron muy tristes.
Algunos se echaron a llorar.
Entonces el hombrecillo de papel de periódico pensó:
“Lo que yo sé no es bueno, porque hace llorar a los niños”.
Y echó a andar, solo, por las calles.
Iba muy triste, porque no sabía hacer reír a los niños De pronto vio una lavandería.
El muñeco de papel dio un salto de alegría y, con paso decidido, entró.
“Aquí podrán borrarme todas las cosas que llevo escritas. Todo lo que hace llorar a los niños”.
Al salir … ¡nadie le habría reconocido!
Blanco como la nieve.
Planchado y almidonado como un niño de primera comunión.
Dando alegres saltos se fue hacia el parque.
Los niños le rodearon muy contentos y jugaron al corro a su alrededor.
El hombrecillo de papel sonreía satisfecho Pero cuando quiso hablar… ¡de su boca no salía ni una palabra!
Se sintió vacío por dentro y por fuera.
Y, muy triste, volvió a marcharse.
Caminó por todas las calles de la ciudad … y salió al campo.
Y entonces, de pronto, se sintió feliz.
Y su corazón de papel daba saltos en su pecho.
Y el hombrecillo sonreía, pensando que tenía un pájaro guardado en su bolsillo
Y comenzó a empaparse de todos los colores que veía en los campos.
Del rojo, amarillo y rosa de las flores: del verde tibio de la hierba; del azul del agua y del cielo y del aire …
Luego se fue llenando de palabras nuevas y hermosas.
Y cuando estuvo lleno de color y de palabras nuevas y hermosas volvió junto a los niños.Y cuando descansaban de sus juegos Y de sus risas, les habló.
Les habló de todas las personas que trabajan para los demás; para que nuestra vida sea mejor, más justa, más libre y más hermosa.
Y sobre el parque y sobre los ojos de los niños cayeron estas palabras como una lluvia fresca.
La voz del hombrecillo de papel se hizo muy suave cuando les habló de las flores …
Y de los pájaros del aire … del mar …
Y de los peces del río y Los rostros de los niños y del hombrecillo de papel se llenaron de sonrisa.
Y cantaron y bailaron cogidos de las manos.
Los rostros de los niños y del hombrecillo de papel se llenaron de sonrisa.
Y cantaron y bailaron cogidos de las manos.
Y todos los días, a partir de aquella tarde, el hombrecillo de papel hacía llover sobre la ciudad todo un mundo de color y de alegría

No hay comentarios: